TORNEO APERTURA 2011 _ Fecha 2 _
Lanús 1Independiente 0

Lanús hace negocio con los ahorros del bancoLe ganó 1-0 a Independiente en tiempo de descuento y es líder con puntaje ideal; al buen equipo que es le suma un recambio importante; Pavone debutó en la última media hora e hizo el gol; reapareció Valeri, ovacionado por los hinchas

Lanús no sólo es temible y respetable por la formación titular de cada partido. En el banco guarda futbolistas que son algo más que relevos circunstanciales para los que están cansados o lesionados. Son individualidades capaces de cambiar un desarrollo e influir decisivamente en el resultado. Un suplente y debutante en Lanús, Mariano Pavone, tuvo una de esas apariciones que recuerdan su estirpe de goleador: definió en los últimos segundos del tiempo adicionado un encuentro que era un empate clavado. Acompañó el desborde de Regueiro a Julián Velázquez para conectar el centro antes de que Milito llegara al cierre.

Suelen ser muy cambiantes los entornos de la carrera de un jugador. Hasta hace menos de dos meses, Pavone era uno de los tantos que rodaron en el declive de River. Lanús surgió en su trayectoria para sumarlo a un proyecto que crece y se robustece en un contexto de orden y previsibilidad institucional y deportiva. Un modelo que le facilita las condiciones para que sólo tenga que ocuparse de ejercer de lo que es: de delantero potente y profundo.

Lanús formó un plantel lo suficientemente largo como para que las soluciones provengan de varios más de los que son titulares. Sus hinchas celebraron y ovacionaron a Diego Valeri cuando fue a sentarse al banco, ya resuelto el conflicto que el volante tuvo con los dirigentes por la renovación del contrato. Sólo los días que estuvo entrenándose al margen del plantel le impusieron a Valeri la condición de suplente. Si bien es una de las figuras (y también debería serlo de un torneo escaso en futbolistas de primer nivel), su vuelta se ajustó a los tiempos de un equipo sin urgencias, que no se ve obligado a pasarles por encima a otros jugadores valiosos dentro del esquema.

La gente de Lanús lo empezó a pedir y Valeri ingresó para disputar algo más de media hora, en la que mostró algunos destellos de su calidad y la necesidad de ir entrando más en ritmo de alta competencia. Con Pavone y Valeri ya en el campo, Schurrer sumó una tercera modificación de perfil ofensivo: Neira por el combativo paraguayo Ledesma. El ex Gimnasia es un volante creativo, chispeante, aunque mentalmente disperso, defecto que Lanús seguramente se encargará de ir corrigiendo.

Como ante San Lorenzo, el Granate ganó sin ser superior a su rival. Igual, su triunfo no deja de tener méritos. Aun en los momentos en que Independiente manejó más y mejor la pelota, Lanús se mantuvo firme y amenazante con el contraataque. Y en el gol mostró una gran virtud: desbordó a los que habían sido los dos mejores de Independiente, los zagueros Julián Velázquez y Milito, que desde atrás sostenían a un conjunto demasiado liviano e intrascendente del medio hacia adelante.

Independiente da algunos indicios preocupantes: le sobran futbolistas complementarios, meros acompañantes, y le faltan hombres decisivos, capaces de contagiar por rendimiento y personalidad, sobre todo en ataque. Milito evitó dos goles, pero no puede estar en todo. Tiene un sentido de la responsabilidad que no comparten todos sus compañeros. El colombiano Pérez dejó una bonita definición en un poste, pero pocas veces lo buscaron bien e inexplicablemente jugó gran parte del segundo tiempo como wing derecho.

Independiente fue laborioso, pero tuvo poco filo. Defederico y Núñez siguen desperdiciando oportunidades. Fredes muestra criterio en la conducción, pero se diluye en el momento de tomar decisiones importantes. Independiente, con el desquite de la Recopa Sudamericana a la vista, está urgido por sumar confianza, pero derrotas como la de anoche lo descapitalizan. Todo lo contrario de Lanús, que vive con la holgura que le dan los ahorros en el banco.

Fuente : Canchallena