sábado, 6 de agosto de 2011


Mariscal del Turco
Milito trota junto a sus compañeros

Milito se entrenó por primera vez junto a sus compañeros, pero lo hizo diferenciado. Hubo práctica livianita en Domínico: trotes y gimnasio.

Gabriel Milito está tan enchufado con su vuelta a Independiente que, si bien sus compañeros no habían vuelto de Shizuoka, lugar en el que perdieron la Suruga Bank con el Jubilo Iwata, se entrenó con la Reserva en Villa Domínico.

Esta vez, ya con el regreso consumado del plante, el Gaby conoció a sus compañeros en la práctica. Hubo una mañana livianita por el predio de Independiente: trotes primero y gimnasio después. Sin embargo, el defensor realizó trabajos diferenciados.

Patricio Rodríguez, que tiene un problema en un menisco de la rodilla derecha, también se entrenó apartado. El Patito quiere recuperarse para decir presente en la Recopa. Al igual, claro, que Milito. El Mariscal del Turco.


Tiene hambre de jugar

Cristian Diaz (DT de la Reserva de Independiente)

Gaby dejó el mejor equipo del mundo y priorizó lo que para mí un futbolista debe tener: hambre de jugar. No era feliz porque no lo tenían mucho en cuenta y sufría porque no podía participar. Hoy las generaciones han cambiado y es difícil encontrar ese razonamiento. Tienen los valores invertidos y desgraciadamente, por ahí, piensan primero en ganar plata antes que un título. Tomó una decisión de hombre y será valorada y bien recibida por todos los estamentos del club: hinchas, dirigentes, cuerpo técnico, juveniles y jugadores. Es un mensaje.

Con esto, Milito marca una línea y muestra que lo que pregonamos en el club es verdad. Que razonando de esa manera, se puede llegar a ser muy grande. Tener a un jugador de Selección, que viene del mejor equipo del mundo, no pasa todos los días y hay que aprovecharlo.

Fuente : Olé

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