Torneo Apertura 2010
Independiente 1Gimnasia 0
En la garganta

Galeano definió como un delantero y puso el 1-0.

Los hinchas recibieron con huevazos al micro de Independiente. Galeano casi se quedó disfónico gritando su golazo para el 1-0. El Rojo jugó mal y sufrió muchísimo en el final pero ganó su primer partido en el torneo. Uf...

Gallego iba a ser pero devolvió un “no”. Fossati no puede asumir ahora. Ya hubo charlas con Pumpido y Trossero. Cagna es candidato. Todo esto desde el lunes, cuando Garnero hizo oficial su renuncia. ¿Confundido? Y, sí. ¿Aturdido? Y, sí. Así salió a jugar Independiente ante un equipo que hasta la fecha pasada ni siquiera había convertido goles. Pero está claro que si Garnero (y Menotti) se fue, el equipo no era precisamente un equipo. O un buen equipo.

De hecho, en el arranque, fue superado territorial y anímicamente por el Lobo. El micro del local hasta fue recibido por sus hinchas con huevazos. Difícil jugar así. Apenas visualizó el área de Gimnasia tras dos pelotas detenidas en forma de centros. En la segunda, la pelota le quedó a Galeano, que definió con categoría, un toque de zurda, a colocar, impropio del presente de tensión que vive el equipo. Luego tendría otra, que Silvera conectó al gol pero la jugada, difícil, fue anulada por offside pese al que el adelantado era Galeano.

Fue el central el que casi mete el segundo, pero su remate dio en el travesaño. El equipo dirigido por Pavoni y Sá no mostró nada demasiado diferente del Independiente de siempre. Tuzzio de cinco, como cambio posicional, aunque idénticas fallas estructurales. Pero enfrente casi, casi tenía a un espejo: este Gimnasia de Cocca no ganará muchos más partidos si sus futbolistas no empiezan a pasarle la pelota a sus compañeros.

Y entonces, Independiente empezó a manejar, o al menos a controlar, a su rival. Y entonces, después de una semana súper hot, ganó su primer partido en el torneo. Y entonces, Pavoni-Sá dirigirán el martes, ante Defensor, por la Copa Sudamericana. Y entonces, Comparada (insultado ayer por los hinchas) y la CD tendrán un cachito más de aire para definir el nuevo técnico. Y entonces, el que llegue deberá corregir mucho, pero mucho, de la cabeza a los pies, para que Independiente empiece a parecerse a un equipo.

Gimnasia, impotente, deberá mostrar signos vitales de manera inmediata. Porque si es a esta versión desdibujada contra la que el miércoles se enfrentará Estudiantes, en el clásico postergado de la 4ª fecha, también habrá un sismo en las tripas. Mientras los hinchas del Lobo gritaban por la renuncia de Cocca, Castro se comió un gol insólito. Y al toque, otro. Acosó, pero no la embocó. Y eso no alcanza…

Fuente : Olé